Conoce a Manuel Ángel Postigo Somavilla, Apicultor y Autor de Apismielera.com
Bienvenido a mi rincón digital, un espacio dedicado a compartir todo sobre mi gran pasión y mi forma de vida: la apicultura. Mi nombre es Manuel Ángel Postigo Somavilla, y aunque nací en la vibrante ciudad de Bilbao en noviembre de 1965, actualmente resido en la apacible localidad de Polientes, en el corazón del Real Valle de Valderredible, Cantabria. Mi historia con las abejas es una de esas que se entrelazan con los recuerdos de la infancia, la tradición familiar y un destino inesperado que me trajo de vuelta a la naturaleza.
Mi primer contacto con el zumbido de una colmena no fue en un apiario, sino en la casa de mi tío abuelo, el cura Acindino. Era un hombre sabio y afable, y su hogar en Ruijas era el punto de encuentro de toda la familia durante las reuniones del día de San Antolín. Recuerdo perfectamente cómo el aire de la casa se impregnaba de un aroma dulce y profundo a miel y cera.
Aunque solo tenía unas pocas colmenas en su jardín, que servían de muestra, eran el reflejo de un gran colmenar que cuidaba con devoción a menos de un kilómetro de distancia en el monte cercano. En aquel entonces, las abejas eran solo parte de la magia de esos días de verano, pero su recuerdo, junto con el olor a miel que me regalaba, se quedó grabado en mi memoria. Era como si esa conexión esperara el momento adecuado para florecer.
El inicio de una pasión y un camino inesperado
Fue muchos años después, a finales de los 90, cuando mi camino se cruzó de nuevo con el de las abejas, esta vez de forma más seria. Tras un accidente que me obligó a replantear mi vida, encontré en la apicultura no solo un pasatiempo, sino una verdadera vocación. Comencé a trabajar codo a codo con mi tío Ursicino, hermano de mi madre y sobrino de Acindino. Con él aprendí los secretos del oficio, la paciencia necesaria para observar el ciclo de la vida en la colmena y el respeto profundo por cada abeja.
Desde 2004, y junto a mi gran amigo Angelito, formamos un equipo inseparable, comenzamos a trabajar con nuestros propios apiarios (foto superior). Juntos, hemos compartido innumerables anécdotas, desafíos y la indescriptible satisfacción de cosechar la miel de nuestro propio trabajo.
El nacimiento de Apismielera.com
Mi pasión por la apicultura me ha acompañado a lo largo de los años, incluso cuando mi esposa y nos mudamos a Palmas, Tocantins, Brasil entre 2010 y 2016. Fue allí, asistiendo a diversos eventos apícolas y con la idea de compartir mi experiencia y conocimiento, donde nació la chispa para iniciar mi blog. Sentía la necesidad de contar mi historia, de educar sobre la importancia de las abejas y de desmitificar la apicultura. Y así fue como Apismielera.com cobró vida, un proyecto que me permite contar mis anécdotas, compartir mis aprendizajes y todo lo que he descubierto en casi tres décadas en este fascinante mundo.
A través de mis escritos, busco ir mucho más allá de las nociones básicas de la apicultura. Mi objetivo es divulgar la importancia crítica de las abejas, guardianas silenciosas de nuestro ecosistema y responsables de una gran parte de la polinización que sustenta la vida en el planeta. Quiero mostrar el trabajo artesanal, la dedicación y el amor que hay detrás de cada gota de miel, y cómo este antiguo oficio es vital para nuestro futuro.
Un viaje continuo y una invitación
En mis artículos, encontrarás una mezcla de conocimientos técnicos sobre el manejo de colmenas, consejos prácticos, anécdotas personales de mis aventuras con Angelito y, sobre todo, mucho amor por estas increíbles criaturas. Espero que disfrutes de este viaje conmigo y que te unas a la comunidad de Apismielera, donde la miel es solo el dulce resultado de una pasión mucho más grande.
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